Son organizaciones sin fines de lucro que contribuyen a reducir el hambre y a prevenir la desnutrición en el país, solicitando la donación de alimentos aptos para el consumo humano a fin de almacenarlos, clasificarlos y distribuirlos entre organizaciones de ayuda comunitaria: comedores, hogares de niños, ancianos, centros comunitarios, entre otros.
Los Bancos de Alimentos funcionan como una "cadena de valor solidaria" dado que distribuyen alimentos que no pueden ser comercializados por diversos motivos, pero sí son aptos para el consumo conforme a las normas sanitarias vigentes, devolviéndoles el valor a los alimentos que han perdido su valor comercial y que de otra forma serían desechados.
La Red Argentina de Bancos de Alimentos cuenta con distintos programas para mejorar la dieta de las organizaciones beneficiarias, logrando la obtención de alimentos frescos y altamente nutritivos para el sano desarrollo de las personas. Mediante una alianza estratégica con las cadenas de Supermercados recibe las mermas de los productos que han salido de la cadena comercial, pero son aptos para el consumo humano, evitando su desperdicio y haciendo que lleguen a los sectores más vulnerables de la sociedad. En